Actualmente son varios los miembros de la familia que tienen relación con las tierras y las aguas de Cádiz. Varios A. De Toledo Golfín veranean por estos pagos y aguas sin residir aquí durante todo el año ; yo, sin embargo, llevo en la ciudad, y muy a gusto, treinta y cinco largos y felices años. Soy, como suelo comentar, sevillanogaditano. Sobre esto, el nombre del blog habla claro.
Las primeras relaciones con la bahía gaditana se constatan mediante la exportación de vinos, procedentes de viñedos familiares en Cazalla, a través de Cádiz y sus Puertos, hacia las Indias desde fines del siglo XVI. Sabido es que los vinos de la Sierra Norte de Sevilla gozaban de buen mercado indiano. Relaciones primeras de indudable carácter económico sin que se tenga constancia de relaciones institucionales con el territorio y zona marítima.
No obstante, desde comienzos del siglo XVIII , tras el casamiento de Nicolás de Toledo Golfín y Guzmán con Ana de Idiáquez y de Castro, portuense, en la Prioral de El Puerto de Santa María, los vínculos se estrechan y se bifurcan. Con posterioridad al casamiento, 2 de Febrero de 1700, ( 1 ) a pesar de seguir viviendo Nicolás en Sevilla por su condición de caballero veinticuatro y Alcalde Mayor ,Nicolás arrienda a Francisco Fernández de Murias y Mon, unas salinas a orillas del río Guadalete. Se trataba de 600 tajos que rendirían 100 ducados de vellón al año ( 2 ). En El Puerto de Santa María, los Toledo Golfín poseerían fincas procedentes de la dote de Ana Idiáquez, nieta de Francisco de Idiáquez, Pagador general de galeras de España.
Nicolás de Toledo Golfín y Guzmán, ejerciendo como Alcalde Mayor de Sevilla, y caballero veinticuatro , presenció el traslado de la Casa de la Contratación a Cádiz. Aquí, su hijo Nicolás de Toledo Golfín Idiáquez, también Alcalde Mayor de Sevilla y caballero veinticuatro del cabildo municipal , tenía buenos amigos como don Francisco Crayvinquel y don Agustín Ghersi ( 4 ). Las relaciones, según las fuentes, se enrarecen tras los primeros años de la décimonónica centuria y así permanecen hasta mi venida y asentamiento en la ciudad en el curso académico 1975-1976. Se gaditaniza así una línea de la familia con mis hijos, Guillermo y Carmen Álvarez de Toledo Castro, quienes nacieron en la ciudad y a ella permanecen vinculados y orgullosos de su gaditanismo abierto a todos los vientos y a todos los mares. Con anterioridad a mi venida a Cádiz, mi tío Pepe, Pepe Álvarez de Toledo Tovar, comenzó su carrera judicial, en la década de los años cincuenta del pasado siglo,ejerciendo como juez en Grazalema, bello pueblo de la serranía gaditana donde yo llevaba a mis hijos algunas temporadas y del que recuerdos entrañables guardamos.
Notas :
(1). Archivo parroquial de la Prioral de El Puerto de Santa María, libro, 35,casamientos,fol, 88, vuelta.
(2 ). Estudios para la ordenación, planificación y gestión integradas de las zonas húmedas de la bahía de Cádiz, coordinados por Barragán Muñoz, J . M, Editorial, oikos-tau , Barcelona, 1996, p , 247.
( 3 ) Documentación familiar de los Álvarez de Toledo Tovar.Libro de los Álvarez de Toledo, fol, 50
( 4 ) Archivo de Protocolos de Sevilla, oficio, 10, año, 1765, fol, 107.
Las primeras relaciones con la bahía gaditana se constatan mediante la exportación de vinos, procedentes de viñedos familiares en Cazalla, a través de Cádiz y sus Puertos, hacia las Indias desde fines del siglo XVI. Sabido es que los vinos de la Sierra Norte de Sevilla gozaban de buen mercado indiano. Relaciones primeras de indudable carácter económico sin que se tenga constancia de relaciones institucionales con el territorio y zona marítima.
No obstante, desde comienzos del siglo XVIII , tras el casamiento de Nicolás de Toledo Golfín y Guzmán con Ana de Idiáquez y de Castro, portuense, en la Prioral de El Puerto de Santa María, los vínculos se estrechan y se bifurcan. Con posterioridad al casamiento, 2 de Febrero de 1700, ( 1 ) a pesar de seguir viviendo Nicolás en Sevilla por su condición de caballero veinticuatro y Alcalde Mayor ,Nicolás arrienda a Francisco Fernández de Murias y Mon, unas salinas a orillas del río Guadalete. Se trataba de 600 tajos que rendirían 100 ducados de vellón al año ( 2 ). En El Puerto de Santa María, los Toledo Golfín poseerían fincas procedentes de la dote de Ana Idiáquez, nieta de Francisco de Idiáquez, Pagador general de galeras de España.
Poco después, Nicolás defendería las costas gaditanas, como Teniente Coronel de Infantería, de los ataques de las flotas anglo-holandesas e incluso participaría en el intento por reconquistar Gibraltar. ( 3 ). Aún más se fortalecerían los vínculos con la bahía de Cádiz cuando varios miembros del linaje ingresen en la Real Compañía de Guardias Marinas y Colegio Naval. Cito , entre otros varios a los que he dedicado una entrada en el blog, a José Luis Álvarez de Toledo y Dubois, diputado en la Cortes gaditanas por Santo Domingo y a su mismo padre Luis De Toledo y Licht, Capitán de Navío. Este José Álvarez de Toledo Dubois, primo hermano de mi quinto abuelo, Rafael De Toledo Golfín y Tudela, casaría con Tomasa Palafox al enviudar Tomasa del XVI duque de Medinasidonia, también llamado José Francisco de Borja Álvarez de Toledo y Gonzaga
Nicolás de Toledo Golfín y Guzmán, ejerciendo como Alcalde Mayor de Sevilla, y caballero veinticuatro , presenció el traslado de la Casa de la Contratación a Cádiz. Aquí, su hijo Nicolás de Toledo Golfín Idiáquez, también Alcalde Mayor de Sevilla y caballero veinticuatro del cabildo municipal , tenía buenos amigos como don Francisco Crayvinquel y don Agustín Ghersi ( 4 ). Las relaciones, según las fuentes, se enrarecen tras los primeros años de la décimonónica centuria y así permanecen hasta mi venida y asentamiento en la ciudad en el curso académico 1975-1976. Se gaditaniza así una línea de la familia con mis hijos, Guillermo y Carmen Álvarez de Toledo Castro, quienes nacieron en la ciudad y a ella permanecen vinculados y orgullosos de su gaditanismo abierto a todos los vientos y a todos los mares. Con anterioridad a mi venida a Cádiz, mi tío Pepe, Pepe Álvarez de Toledo Tovar, comenzó su carrera judicial, en la década de los años cincuenta del pasado siglo,ejerciendo como juez en Grazalema, bello pueblo de la serranía gaditana donde yo llevaba a mis hijos algunas temporadas y del que recuerdos entrañables guardamos.
Notas :
(1). Archivo parroquial de la Prioral de El Puerto de Santa María, libro, 35,casamientos,fol, 88, vuelta.
(2 ). Estudios para la ordenación, planificación y gestión integradas de las zonas húmedas de la bahía de Cádiz, coordinados por Barragán Muñoz, J . M, Editorial, oikos-tau , Barcelona, 1996, p , 247.
( 3 ) Documentación familiar de los Álvarez de Toledo Tovar.Libro de los Álvarez de Toledo, fol, 50
( 4 ) Archivo de Protocolos de Sevilla, oficio, 10, año, 1765, fol, 107.
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