José Luis Suárez Cantero es un señor bajito y enjuto de luengas barbas valleinclanescas a un cigarrillo pegado.Es arquitecto, el arquitecto de mi casa y de otras muchas en Cádiz y fuera de ella.Independiente como él solo,pasea echando humo como una chimenea ambulante por las calles de su ciudad.Es un hombre bueno al que su sencillez lo complejiza. Cariñoso y de muy buen corazón,su estrafalaria y menuda figura lo hace reconocible desde distancias largas.Inconfundible.A veces puede recordar a Voody Allen.De vez en cuando me lo cruzo y hablo algo con él.Fue vecino nuestro durante algunos años y creo que lo conozco un poco por dentro,aunque tienda a enmascararse al gaditano modo.
Un día le presenté a mi padre y estuvieron hablando un buen rato.Noté que entre ambos se había producido, de manera inmediata,empatía.Tal, que tras tomarnos una cervezas,se despidió de mi padre dándole un tortacito en sus cachetes sonrosados.Desde aquél día mi padre siempre me preguntaba por " el barbas".José Luis Suárez es hombre muy inteligente,casado con una señora encantadora,Isabel Samaniego,amiga nuestra.La convivencia diaria con personas extravagantes debe ser dificultosa.Su riqueza de matices intelectuales unida a la sencillez extrema deben formar un cóctel molotov que puede estallar en el más inesperado momento.Es aficionado a la pintura. Su amigo y colega Arturo Infante Miranda,que también vivió en la casa y lo ayudó a proyectarla,me comentaba que, lápiz en mano,era un genio, un maestro del diseño.No he visto dibujos suyos pero me los imagino.Es un creador nato como refleja su arquitectura, buen ejemplo de la cual es mi casa de la que hay muchos enamorados.En su estilo arquitéctónico,opino como profano en la materia,veo influencias de Le Corbousier y de Gaudí.Mi casa es como un barco mecido por las olas y los vientos de la Bahía de Cádiz.La maqueta estuvo expuesta en Nueva York como ejemplo de cómo se debe construir en primera línea de costas.Sus vuelos y curvas recuerdan a las olas próximas que parecen poder salpicarnos.Sus grandes vanos acristalados permiten ver el mar desde casi cualquier lugar .Es el edificio con mayor personalidad arquitectónica del paseo marítimo,en el que Suárez vivió hasta hace unos ocho años,pero cuyos propietarios actuales,en buena parte,no saben cuidar como se merece y , tal vez,tampoco sepan valorar su estética, a pesar de la obra que en los días actuales se hace para reparar la fachada.Me hubiese gustado que Isabel y José Luis hubiesen seguido viviendo en la casa.Son, aunque muy diferentes,dos personas dignas de admiración que,sobre la obra que se realiza, hubiesen tenido muchas cosas, con sentido, gusto y sentimiento, que decir.Creo que no se la cargarán.Hasta ahora,parece que no.
Un día le presenté a mi padre y estuvieron hablando un buen rato.Noté que entre ambos se había producido, de manera inmediata,empatía.Tal, que tras tomarnos una cervezas,se despidió de mi padre dándole un tortacito en sus cachetes sonrosados.Desde aquél día mi padre siempre me preguntaba por " el barbas".José Luis Suárez es hombre muy inteligente,casado con una señora encantadora,Isabel Samaniego,amiga nuestra.La convivencia diaria con personas extravagantes debe ser dificultosa.Su riqueza de matices intelectuales unida a la sencillez extrema deben formar un cóctel molotov que puede estallar en el más inesperado momento.Es aficionado a la pintura. Su amigo y colega Arturo Infante Miranda,que también vivió en la casa y lo ayudó a proyectarla,me comentaba que, lápiz en mano,era un genio, un maestro del diseño.No he visto dibujos suyos pero me los imagino.Es un creador nato como refleja su arquitectura, buen ejemplo de la cual es mi casa de la que hay muchos enamorados.En su estilo arquitéctónico,opino como profano en la materia,veo influencias de Le Corbousier y de Gaudí.Mi casa es como un barco mecido por las olas y los vientos de la Bahía de Cádiz.La maqueta estuvo expuesta en Nueva York como ejemplo de cómo se debe construir en primera línea de costas.Sus vuelos y curvas recuerdan a las olas próximas que parecen poder salpicarnos.Sus grandes vanos acristalados permiten ver el mar desde casi cualquier lugar .Es el edificio con mayor personalidad arquitectónica del paseo marítimo,en el que Suárez vivió hasta hace unos ocho años,pero cuyos propietarios actuales,en buena parte,no saben cuidar como se merece y , tal vez,tampoco sepan valorar su estética, a pesar de la obra que en los días actuales se hace para reparar la fachada.Me hubiese gustado que Isabel y José Luis hubiesen seguido viviendo en la casa.Son, aunque muy diferentes,dos personas dignas de admiración que,sobre la obra que se realiza, hubiesen tenido muchas cosas, con sentido, gusto y sentimiento, que decir.Creo que no se la cargarán.Hasta ahora,parece que no.
7 comentarios:
También fué vecino mio durante muchos años, aunque fuera una vecindad distinta a la tuya Guillermo. Fuimos vecinos de "currelo", cuando ambos trabajabamos en el edificio "El Fénix". Siempre me resultó un personaje curioso, una de esas personas "pa conocerla". Recuerdo su estampa en "El Lucero" tomando café y fumando, desde luego. como cada vez que se pasaba por mi oficina se olvidaba algo: la cartera, las llaves o un plamo, pero sobretodo no puedo dejar escapar una sonriza cuando lo recuerdo en su estudio trabajando, un lugar mas parecido a la trastienda de "Casa Crespo" que a un estudio de Arquitectura. Lo dicho: todo un personaje.
Mi admiración y respeto para D. José Luis. gran Arquitecto y buena gente
Jacqueline, cuenta…
Conocí a José Luis en los años 64, por su amigo y compañero Arturo Infante Miranda, el cual era mi novio en esta época. Estaban llenos de perspectivas, no solo en el trabajo sino en la imaginación desbordante y futurista en concepto de arquitectura demasiado adelantada en estos tiempos. Arturo después de la carrera, se quedó en Barcelona con otros arquitectos, Marcos Carbonnel, y un alemán Jack Reichardt, siguiendo los conceptos del modernismo de esta autonomía Catalana. Estando yo en Francia, Arturo me dijo qué me parecía casarnos e ir a instalarnos a Cádiz, que José Luis quería seguir sus trabajos con él; conociéndose tan bien, uno a otro, por sus ideas creativas, tanto en arquitectura como en decoración, esa colaboración, con estas afinidades, y esta amistad, fue de lo más acertada.
Cuando llegué, no dominaba el castellano, venía de Paris, y, me encontré en un pueblo bastante retrogrado, y pobre, su gente simple pero alegre, honrada y orgullosa de sentirse andaluces. Mi hablar muy rudimentario, me acerco más a Isabel, esposa de José Luis, mujer excepcional, siempre dispuesta a ayudar y me acogió con tanto cariño, que desde este momento, y hasta hoy, formamos una familia
La mejor imagen de Isabel que tengo en la mente es ver una madre, igual que una gallinita seguida de sus 5 polluelos…..Nuestras llamadas telefonicaza horas indebidas, informándonos donde estaban nuestros hombres, que uno u otro avisaba del retraso por encontrarse en la provincia, con tal o tal empresa, concretando presupuestos u otro menester del oficio. Las carreteras no estando como ahora, sino llenas de baches, pésimas señalizaciones, en fin una época que fue para mi retroceder a un tiempo remoto que no llegué a conocer antes. Entonces el que llaman el barba estaba desprovisto de esta particularidad, siempre delgado, y con pitillos encendidos.
Quiero subrayar que Isabel, con su cultura, su paciencia, su comprensión, facilitó que José Luis pudiera dedicarse por entero a sus proyectos. Añadiré, lo dicho:
Detrás de cada gran hombre hay una gran mujer, así lo veo y lo viví y lo vivo de tan de cerca, que confirmo esta verdad.
Con el fallecimiento de Arturo, me quedé en el piso que hizo, enteramente diferente a lo demás, donde cada rincón tiene su funcionalidad, sin quitar nada de su armonía y belleza.
Quiero recordar que la primera iglesia que se edifico en la Laguna la de San German y san Servando, enteramente de hormigón armado fue una de las obras maestra que realizaron, como nuestro edificio, reconocido como monumento historico del siglo 20,salio con esta iglesia en varias publicaciones especializadas internacionales .
Amigo Guillermo, me parece fantástico hablar de este personaje. Agradecerle a José Luis, muchas obras y rehabilitaciones, como entre otras cosas el teatro romano en Cádiz. Artista lo era, lo es y lo será, sigue en la brecha, con la admiración y la consideración de todos.
Jacqueline :
No sé si leerás esta respuesta a tu bonito y cariñoso comentario en Cádiz o en tu Paris, también muy querido.Lo hagas en Hispania o en la Galia, te doy las gracias por leer mi blog y un abrazo .
Guillermo
Hoy, con mucho pesar, tengo que informar del fallecimiento de mi suegro, José Luis Suárez Cantero.
Lo sentimos mucho mi mujer , mis hijos y yo. Una persona honrada y admirable que se va.
Abrazos nuestros a toda la familia.
Guillermo.
Tuve la oprtunidad de conocerlo ,realizando yo como jefe de obras y el como arquitecto director, junto con su inseparable Arturo Infante 200 viviendas en los Barrios y en mi vida profesional jamas he encontrado dos " Personajes mas peculiares" Imposible permanecer impasible ante ellos Mi mas sentido pesame a su familia
Así es José Luis. Arturo y él fueron vecinos de nosotros en la casa del Paseo Marítimo de Cadiz que, precisamente hizo José Luis Suárez, y amigos nuestros . Gracias por haber leído la entrada al blog que de él hice hace ya varios años.
Guillermo.
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