UNA REPRESENTACIÓN DE LOS ÁLVAREZ DE TOLEDO GOLFÍN VISITA LA CASA DE LOS MAESTRANTES DE SEVILLA Y LA MAESTRANZA.

Paseo Colón. Puerta del Príncipe de la plaza de toros de la Maestranza . Cinco de la tarde del día 11 de noviembre de 2011 , festividad de san Martín de Tours, santo húngaro del siglo IV , desprendido como él y pocos más , que llegó a darle la mitad de su capa a un pobre hombre que estaba aterido  , escena inolvidable que pintó el Greco toledano Doménico Teotocópuli en 1597 con su inconfundible buen estilo. Festividad del obispo de Tours y de otros santos del santoral católico apostólico y romano , como el del anacoreta Menas y el de Valentín y Atenodoro , el regalo de Atenea , mártires , y que no son menos.

Luce el sol del otoño sevillano sobre la Giralda , la Torre del Oro , las aguas de el Guadalquivir que acabo de atravesar por el puente de Triana y las cabezas de los Toledo Golfín , tan sui generis , a las que voy a unir la mía , semejante en cuanto que llevamos los mismos genes. Todos los Toledo allí reunidos , en la Puerta del Príncipe, descendemos de Guillermo Álvarez de Toledo García , nuestro común bisabuelo, y de Nicolás de Toledo Golfín y Guzmán , uno de los fundadores de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla allá por el año 1670 o 1671. Por ser descendientes directos de este Alcalde Mayor de Sevilla y caballero Maestrante, está la representación familiar , unos treinta y tantos incluídos mujeres respectivas , rodeando a un Maestrante actual , Javier Guajardo-Fajardo Alarcón de la Lastra , amigo de mi primo Fernando Álvarez de Toledo Franco-Romero , quien nos acompañará y explicará los pormenores y pormayores de la visita que tanto nos gustó por  completa y bien explicada. Carmen , mi mujer , se atrevió a subir por la escalera de caracol de la más que interesante biblioteca sin que yo , inseguro de mí , tuviese la galantería , a la que obligado estaba , de acompañarla.Ya no estoy para algunas cosas y no olvido que la vista es la que trabaja ni alguna que otra rodada por peldaños de escaleras causante de cardenalones gaditanos , no romanos ni católico- apostólicos.

Al pisar el albero , por primera vez y sin toro en el ruedo , de uno de los cosos taurinos más bellos y mejor cuidados del mundo, me vino al magín la primera vez que , desde un tendido , creo recordar que de sol y sombra , asistí a una corrida de toros en tan privilegiado lugar.Tendría unos siete u ocho años y fui a la Maestranza de Sevilla de la mano de mi abuelo Pepe Pineda Calle , mi instructor en tan complejo como delicado , atractivo y español mundo , currista confeso y convencido lo que indica sus preferencias en lo que respecta a la tauromaquia.

Cuando me despedí de Javier Guajardo Fajardo y de su mujer , Enriqueta , mona y encantadora, , les di las gracias y me acordé de los paterfamilias . A casa de uno de ellos , la de tío Pepe Álvarez de Toledo Tovar y tía Consuelo Liñán Rico fuimos , Carmen y yo , tras sugerencia de mi prima Consuelo Álvarez de Toledo Liñan , su hija. Alegrías recíprocas al vernos. Nadie diría que dos días después nos volveríamos a ver en el entierro del paterfamilias mayor de los que quedan. En el entierro de mi  tío Felipe Álvarez de Toledo Tovar , admirado y querido. Sobre él escribiré otras letras porque su trayectoria vital lo merece. De nuevo gracias a Javier Guajardo-Fajardo , a su mujer , a mi primo Fernando que facilitó la visita y al personal de la Maestranza que tan bien nos atendió. Y más gracias por los ejemplares del libro que nos regalaron , precioso : Historia Gráfica de la Plaza de Toros de Sevilla. Esto más que historia de los Álvarez de Toledo Golfín , es actualidad de los Álvarez de Toledo Golfín , pero las actualidades , para convertirse en historia contemporánea necesitan poco tiempo.  Mientras más días , meses y años pasen , los hechos y circunstancias actuales van perdiendo sus cualidades de contemporaneidad y ganando en historicidad. Decía don José Ortega y Gasset que la Historia lo es todo y todo lo actual terminará siendo historia e Historia ( lo último lo digo yo ). Pobres hombres los que ignoren sus historias y la Historia , digo yo también , tan por debajo de nuestro filósofo Ortega.