Y le respondo que , dadas las fechas en las que estamos y las circunstancias por las que atravesamos y atravieso , todavía no hemos podido fijar fecha ni lugar para efectuarla . Creo que son argumentos suficientes que justifican el retraso en lo prometido. Que comprendo el interés que pueda suscitar la entrevista pero que lo primero es lo primero y , en el caso que me ocupa , la atención a mi nonagenaria madre que , gracias al Gran Hacedor , se recupera con rapidez y naturalidad de su último achaque propio de su edad provecta. , tiene prevalencia
Así se lo hago saber a don Máximo de la Serena y Monterrubio de la Serena , quien como es sabido tiene otros seis apellidos extremeños más y es hombre de ley ( extremeño hasta la médula ) , comprendiendo la validez y el peso de mis argumentos.
Sin embargo , me vuelve a apremiar en cuanto que pronto él empezará sus vacaciones de verano y le gustaría conocer la opinión de mi primo sobre cuestiones que son de ámbito y dominio casi público pero apenas puestas sobre el tapete con la claridad que tendrá que responder a mis claras preguntas. .
Aunque mi relación con el señor de la Serena , como con toda persona que sea como todas debieran ser es óptima ; le respondo que no puedo asegurarle nada al respecto y que , si a bien lo considera , me cese en mis labores de colaborador en EL PERIODICUS mediante la sección ENTREVISTAS SINCERAS.
Nada de eso , dilecto Wilhelmus , me dice , para continuar haciendo un panegírico a los entrevistados y al entrevistador recalcando el elevado número de cartas al director que recibe en las que se escribe que se echan de menos tan interesantes y originales entrevistas que repercuten en la buena marcha económica de la editorial de EL PERIODICUS.
Comprendiendo la postura y el apremio que recibo de don Máximo , le doy un abrazo fuerte y sentido de agradecimiento , al tiempo que , también por vía telefónica , recibo la noticia de la muerte de un gran amigo , muy valioso como persona : Ángel Moreda , fallecido a los ochenta y ocho años , bastante más edad que la mía , lo que no fue obstáculo alguno para nuestra bonísima relación y afecto recíproco. Ángel también creía que , en el hombre , no todo es materia , aunque los más sean de granito. Lo de granito es de mi cosecha y a la vista de los productos del campo.
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