Son las once de la mañana y suena el teléfono fijo. Al otro lado del hilo oigo la voz de don Felipe tras haber dormido la turca sin turca. Su voz delata , por pastodidad, la que anoche cogió. Como esperaba, nada recuerda y le repito que no estaría de más que me enviase a Islandia como informador aséptico de su periódico. Ni borracho , me responde. Bueno, bueno no se enoje , respondo sin seguirle el juego. Mantengo un prudente silencio. ¿ Sigue ahí ?. Si , claro.
Quiero que haga su maletín de viajes rápidos y se dirija al aeropuerto de Jerez donde lo espera mi avión particular para llevarlo , sin dilación, a Barcelona. Tiene entrada reservada junto a Mourinho para que vea y haga la crónica del partido Barcelona- Madrid. Haga la crónica , también , sobre el comportamiento y reacciones del entrenador madridista.
No hay más que hablar, don Felipe,sólo tengo que coger dos cosas y dentro de una hora estoy a pie de avión. ¿ Quién pilota ?.
Arturito Pérez , mi experto piloto. Navegará ,con él ,seguro por los aires ibéricos. Ya le he hablado, bien como merece, de usted. Apríétese el cinturón que en los despegues es algo brusco. Llevo varios años apretándomelo bien por la crisis galopante, contesto y cuelgo.
Arturito es hombre risueño y madridista como refleja el escudo que luce en su solapa. Habla con lentitud y modula muy bien a pesar de su acento extranjero , francés diría yo. Tras hacerle el padrón remontamos vuelo y , al poco , sobrevolamos Sevilla y su feria de abril en mayo. En efecto es francés de Carcasonne , lo que no es óbice para su madridismo. Su madre es española capitalina, Mariquita Pérez. Se llama, por tanto, Arturo Pérez y Pérez , un francés de origen español. No tanto, me comenta. Mi familia paterna lleva siete generaciones siendo francesa. Mi antepasado, José Pérez , llegó a Francia procedente de Lepe , el pueblo de Huelva. Uno de sus descendientes formó parte de las tropas napoleónicas que invadieron su España a principios del siglo XIX , dice sin especificar año y lugares en los que su más que bisabuelo hizo de cuervo que sacó ojos. Traidorcete, vamos , pienso, sin que mi pensamiento aflore con palabras. Discreto, que soy.
Sí le comento que su madre tiene nombre de muñeca española de primera mitad del siglo XX. Nombre y figura , responde. Est trés jolie , continúa sabiendo que lo voy a comprender en su lengua vernácula. El día está claro y distingo el cauce de El Tajo allá muy abajo. A la media hora escasa estamos aterrizando en el Prat sin problemas. Espero que los que esta noche se produzcan sean sólo futbolísticos y deportivos solventados con deportividad. Hasta ahora el tal Mourinho está callado. Como mejorcito está, Hasta mañana. Wihelmus Alvarinus Toletanus informó, sobrevolando la piel de toro , para el diario EL DÍA DE MAÑANA. No he notado controles especiales por lo de Laden. Es una cuestión periodística que me gustaría cubrir; para algo fui el único periodista que logró entrevistarlo. Entrevista no suficientemente valorada por los medios de comunicación ni por nadie excepto por mi primo Felipe Álvarez de Toledo Naranjo al que desde aquí la doy un abrazo y le digo que lo eché de menos en la última reunión familiar tan grata pero no barata para lo que por allí apareció en bandeja.Pocas cosas hubo que se pegaran al riñón. No creo, queridos primos organizadores , que os moleste este sincero comentario. A mí así me lo pareció. El sitio, ideal. Las cosas de comer, idealizadas.
Quiero que haga su maletín de viajes rápidos y se dirija al aeropuerto de Jerez donde lo espera mi avión particular para llevarlo , sin dilación, a Barcelona. Tiene entrada reservada junto a Mourinho para que vea y haga la crónica del partido Barcelona- Madrid. Haga la crónica , también , sobre el comportamiento y reacciones del entrenador madridista.
No hay más que hablar, don Felipe,sólo tengo que coger dos cosas y dentro de una hora estoy a pie de avión. ¿ Quién pilota ?.
Arturito Pérez , mi experto piloto. Navegará ,con él ,seguro por los aires ibéricos. Ya le he hablado, bien como merece, de usted. Apríétese el cinturón que en los despegues es algo brusco. Llevo varios años apretándomelo bien por la crisis galopante, contesto y cuelgo.
Arturito es hombre risueño y madridista como refleja el escudo que luce en su solapa. Habla con lentitud y modula muy bien a pesar de su acento extranjero , francés diría yo. Tras hacerle el padrón remontamos vuelo y , al poco , sobrevolamos Sevilla y su feria de abril en mayo. En efecto es francés de Carcasonne , lo que no es óbice para su madridismo. Su madre es española capitalina, Mariquita Pérez. Se llama, por tanto, Arturo Pérez y Pérez , un francés de origen español. No tanto, me comenta. Mi familia paterna lleva siete generaciones siendo francesa. Mi antepasado, José Pérez , llegó a Francia procedente de Lepe , el pueblo de Huelva. Uno de sus descendientes formó parte de las tropas napoleónicas que invadieron su España a principios del siglo XIX , dice sin especificar año y lugares en los que su más que bisabuelo hizo de cuervo que sacó ojos. Traidorcete, vamos , pienso, sin que mi pensamiento aflore con palabras. Discreto, que soy.
Sí le comento que su madre tiene nombre de muñeca española de primera mitad del siglo XX. Nombre y figura , responde. Est trés jolie , continúa sabiendo que lo voy a comprender en su lengua vernácula. El día está claro y distingo el cauce de El Tajo allá muy abajo. A la media hora escasa estamos aterrizando en el Prat sin problemas. Espero que los que esta noche se produzcan sean sólo futbolísticos y deportivos solventados con deportividad. Hasta ahora el tal Mourinho está callado. Como mejorcito está, Hasta mañana. Wihelmus Alvarinus Toletanus informó, sobrevolando la piel de toro , para el diario EL DÍA DE MAÑANA. No he notado controles especiales por lo de Laden. Es una cuestión periodística que me gustaría cubrir; para algo fui el único periodista que logró entrevistarlo. Entrevista no suficientemente valorada por los medios de comunicación ni por nadie excepto por mi primo Felipe Álvarez de Toledo Naranjo al que desde aquí la doy un abrazo y le digo que lo eché de menos en la última reunión familiar tan grata pero no barata para lo que por allí apareció en bandeja.Pocas cosas hubo que se pegaran al riñón. No creo, queridos primos organizadores , que os moleste este sincero comentario. A mí así me lo pareció. El sitio, ideal. Las cosas de comer, idealizadas.
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