Ser profesor de Historia, lo que he sido, es tarea compleja si se quiere ser honrado y objetivo en el desempeño de la función.Requiere conocimientos del pasado del hombre y bibliográficos actualizados . a más de una visión panorámica mundial , a la vez que conocimientos geográficos como apoyatura e incluso jurídicos , antropológicos, artísticos , filosóficos y literarios. Dijo don José Ortega y Gasset que la Historia era todo y creo que acertó. Ser culto , bien hablado y correcto escribidor son , como se deduce de lo anterior , condiciones sin las cuales no se desempeñará el trabajo con eficacia y dignidad. Las lecturas contínuas nos ayudarán a acercarnos a las verdades históricas , que nunca podremos aprehender en su totalidad , y nos formarán , alejando al profesor de cualquier radicalismo ideológico. La vocación y el sentido común debieran siempre ser compañeros del profesor de Historia.
Aún más compleja , pienso que será , hoy , y por las innumerables ediciones y escritores que surgen , ser profesor de Literatura. La Historia fue , pero la Literatura fue y es. Sigue siendo y creciendo y aunque el tiempo, matriz de la Historia , sigue también su discurrir , su dimensión es más lineal que la de la Literatura ; si bien todos los hombres hacemos la historia y no todos escribimos. Viene esto a cuento de dos libros que me ha prestado mi hijo , propiedad de su novia, de dos buenos escritores. Es uno de relatos : El Esplín de París , de Baudelaire, y el otro de Umbral : Mortal y Rosa. Los leeré en cuanto que dos maestros de las letras fueron . Seguiré , así, aprendiendo hasta que muera sabiendo lo poco que sabré cuando vaya a Dios sabe dónde.
Aún más compleja , pienso que será , hoy , y por las innumerables ediciones y escritores que surgen , ser profesor de Literatura. La Historia fue , pero la Literatura fue y es. Sigue siendo y creciendo y aunque el tiempo, matriz de la Historia , sigue también su discurrir , su dimensión es más lineal que la de la Literatura ; si bien todos los hombres hacemos la historia y no todos escribimos. Viene esto a cuento de dos libros que me ha prestado mi hijo , propiedad de su novia, de dos buenos escritores. Es uno de relatos : El Esplín de París , de Baudelaire, y el otro de Umbral : Mortal y Rosa. Los leeré en cuanto que dos maestros de las letras fueron . Seguiré , así, aprendiendo hasta que muera sabiendo lo poco que sabré cuando vaya a Dios sabe dónde.
No hay comentarios:
Publicar un comentario