Me hago eco de la noticia que se puede leer en cualquier periódico de hoy , yo la leo en Diario de Cádiz , para imponerme no hablar tanto de la enfermedad que me aqueja. Ponerme pesado nunca ha sido característica del escribidor , aunque a veces lo pueda parecer ; y , por ello , recojo la noticia que a unos les parecerá buena y a otros menos buena o simplemente mala . Gustos para todo hay.
A mí , personalmente , no me parece la mejor que se pudiera leer habiendo otras cosas de capital importancia , en España , por resolver. Al no querer , de forma voluntaria , decir nada sobre los hechos y dichos de los políticos , en este caso específico de la política y ministra doña Fátima Báñez , sí afirmo que cada país tiene sus costumbres , respetables unas y menos respetables otras , y que proponer e intentar que en la España meridional se adopten los mismos horarios y costumbres que en la Europa central y nórdica no es más que una manera de tender a la globalización que tan admirada es por parte de buen número de individuos y tan denostada por menos . Para el escribidor , lo de la aldea global pocas ventajas ofrece al globo terráqueo aunque sea el camino que se sigue y se persigue.
Siendo aquellos mayoría , las minorías estamos obligadas a aceptar sus opiniones , por erróneas que nos parezcan y poco las compartamos. No nos queda otro derecho más que el del pataleo , derecho que no acostumbro a ejercer en el caso comentado ni en otros . Me atrevería a escribir que casi nunca porque su utilidad es nula
A pesar de ello y siguiendo con mi idea de no no comentar lo que dicen , hacen y proyectan los que piensan que dirigen , mangonean y mandan en los distintos ramos de la administración española, la implantación del propuesto nuevo sistema horario ( utilizando el término sistema no hay confusión posible entre uso horario que significa una cosa , en mi opinión, y huso horario que significa otra muy distinta ) en nuestro territorio ; creo que sería algo tan aberrante como el intentar quitarnos la media hora , o más , de siesta , o nadar a contracorriente en la playa. U otras cuestiones de índole distinta que mencionar no quiero.
Aunque rompí mi promesa de no escribir más sobre el tan capitalizado y vulgarizado deporte del fútbol, mis lectores podrán cerciorarse de que respeto mi promesa de no hablar ni escribir sobre políticas , políticos y política , como suelo respetar todas las promesas a no ser que surjan causas mayores que favorezcan la ruptura .
Por hoy , ya me he distraído un tiempo tecleando , como tengo aconsejado , y he vuelto a cumplir mi promesa de hacerlo todos los días ( mientras pueda ) aunque solo trate nimiedades o cosas sin importancia ; si bien cada persona pueda otorgarle la que quiera . La libertad , bien entendida y teniendo en cuenta las libertades de los demás , es aconsejable. En caso contrario , libertad para mí pero no para otros , no.
Nunca debiésemos querer solamente para nosotros el ancho del embudo y la parte estrecha para los demás. Pero así hay tantos ...
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