Emilú ya está como si tal cosa tras su operación. Alegre , dormilona , juguetona , cariñosa y dando más calor de hogar a nuestra casa que es la suya Corre que se las pela de un sitio a otro y juega con sus ratones de cartón haciendo piruetas increibles pero ciertas . A mi más que a un tigre o tigresa , no vayan éstas a molestarse porque ahora todo el mundo animal sea racional o no se molesta por cualquier cosa sin motivo para molestarse a menos que sea algo lelo o LELA , memo o MEMA , me recuerda , a veces , cuando la observo de perfil , a un leopardo hembra . Se entretiene mirando los pajaritos desde las ventanas de los dormitorios de Wilhelmus Albanus , su dueño , introductor de ella en casa e hijo de Carmen-carminis y mío ; y de Carmen-niña . Hoy , muy de mañana , la vi intentando alcanzar la mariposa de madera con sus almohadilladas garritas sin lograrlo. Dice el veterinario que la atiende que es gata buena . Nosotros compartimos su opinión y seguimos muy contentos con su venida a casa aumentando el número de habitantes de la misma humanos y no humanos ( tengan o tengáis presente mis caros lectores que Willy le lapin también existe y la condición semihumana de Titín Kambumba).
Ahora mismo la oigo jugar con su ratoncillo de cartón piedra preferido. Esta entrada va por ti , Emilú, a manera de un brindis de torero a alguno de los espectadores del Ruedo Ibérico que está que arde entre unas cosas y otras . Acabo de verte entrar en la habitación desde la que te dedico esta entrada y tú a mi lado sin saber yo , a ciencia cierta , se me miras como a una mariposa o a un asesino. Sabes que ni lo primero ni lo segundo soy. Vuelvo a mirarte y ya te has ido . Eres silenciosa como tú sola. Silenciosa , prudente y discreta . Muy buena . Tal vez hayas ido para volver a intentar coger a la mariposa de madera que posada está en el cristal de la sala de estar desde la que tanto tú como yo miramos el mar y nos extasiamos mirándolo. No sé si tú , mas yo , sin duda , pensando y repensando en las cosas de la vida , de la muerte y del hombre que es mortal aunque no le guste serlo y crea que su vida terrenal y material será eterna. Craso error.
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