ASUNTOS DELICADOS.

Abundan en nuestras vidas. Entre ellos y de actualidad están los de la Infanta Cristina y el de la nueva ley del aborto. Mi silencio hacia ellos no se debe a falta de valentía para escribir sobre ambos  sino a que no todas las opiniones , las íntimas sin ir más lejos ,   tienen porqué  exponerse a la vista más o menos pública. A pesar de ello , partiendo de la base de que son asuntos delicados y complejos que muy bien pudieran quedar en el ámbito de mi intimidad si así lo quisiera , he de decir que el primero ( el de la Infanta Cristina ) me parece incomprensible en formas y fondo. No acierto a comprender cómo el señor Urdangarín osó inmiscuirse en negocios tan sucios. Lo normal es que la hija del Rey don Juan Carlos supiese o se oliese algo  aunque la justicia dictaminará sobre el tema lo que , de forma aparente , estime justo . Yo tengo mi idea hecha y para mí se queda  el  derecho a exponer o no mis pensamientos sobre tan delicado asunto. Me asiste el derecho.   El mismo derecho que me hace cumplir mis obligaciones antes que exigir aquellos  , lo cual no es moneda común en nuestra España ; y una de estas supuestas obligaciones , según usted , como persona que vive en la realidad que nos rodea , acabo de exponerla sin crudeza ni ensañamiento. Con la mesura , claridad y tacto que el caso necesita y a petición de un seguidor al que no conozco pero que sigue y lee el blog.¡ Va por usted!

La misma mesura , claridad y tacto son necesarias para escribir algo relacionado con la nueva ley del aborto del ministro Gallardón tan traída , llevada y , bajo mi punto de vista, innecesaria . Sobre dicha nueva ley opino que nadie , en sus cabales y con embarazos deseados , pueda desear interrumpirlo sin causa mayor que lo aconseje o exija. Otras circunstancias pueden tener los embarazos no deseados . Sea el embarazo voluntario y gozoso o involuntario ( gozoso o no)   , lo que no dudo es de que las personas , embarazada y embarazador , debieran ser responsables de sus actos sean más o menos jóvenes. Los detalles los reservo para mi intimidad. No entro en ellos porque complejos y delicados pueden ser.

En cualquier sentido , caro seguidor , aquí van expuestas , de forma somera y comprimida , mis opiniones al respecto . Aunque hubiese podido guardármelas porque nadie me debe  obligar a pronunciarme en torno a asuntos tan delicados ni a nada , lo hago en atención suya y demostrando que no me  escondo nunca aunque algunos puedan confundir la discreción con falta de valentía y las buenas formas con cobardía. Todo se suele confundir.