Vaya vejez que le están dando a don Juan Carlos I .Que si relaciones con Bárbara Rey o con otras señoras y señoritas. Que si esto o que si lo otro. La cuestión es no dejar tranquilo a don Juan Carlos buscándole cualquier asunto escabroso. Aunque se tratase de echar tierra sobre el juicio a Iñaqui Urdangarin y de ocultar asuntos de mayor enjundia política ,como algunas lenguas dicen , la verdad es que no se deja tranquilo al anterior Rey de España . Es vox populi que por investigaciones historiográficas se conoce la tradicional forma de actuar de la dinastía de los Borbones en asuntos de faldas o de pantalones tanto en España como en Francia de donde son orignarios. Buenos ejemplos de ellas son las relaciones masculinas de la Reina Isabel II de España y para qué citar otras muchas más de los miembros de la dinastía Real aquí , en Francia o en cualquier otro lugar . En todo caso , las relaciones femeninas de don Juan Carlos solo debieran interesar y herir a su mujer , la Reina doña Sofía , y a sus hijos y no al conjunto de mortales a los que la cuestión parece interesarle de forma excesiva ; en especial a los republicanos . Sin ser yo monárquico ni republicano ( se sabe como respiro en política ) , me permito echar mi cuarto a espadas en el asunto al sentirme español que es lo que soy. Español con depresión pero español al fin y al cabo . Excepción , al menos así lo parece , en lo que el escribidor dice , es el actual Rey don Felipe VI . La Reina consorte , por su parte , no creo que le permitiera a su marido que ejerciese su virilidad fuera del matrimonio ; cuestión que el Rey actual no creo que sea de su gusto aunque muchas pretendientas a su cama hubiese como , sin duda, habrá ; pero doña Letizia es doña Letizia , muy mona por cierto , aunque sus defectos tenga. Todos tenemos los nuestros .
De cualquier manera , si bien el comportamiento de don Juan Carlos no es ejemplar en este sentido ni en otros , no deja de ser parte de su vida íntima y no sé a qué viene ahora airearla de la forma en la que se está aireando. Sea por una cosa o por otra , la verdad es que no se deja tranquilo a don Juan Carlos para que disfrute de su vejez . Aunque algo de esto escribió el escribidor en entrada anterior , vuelvo ahora a escribir sobre el mismo asunto porque advierto muchas intenciones malsanas en varios programas de televisión , revistas y periódicos que se hacen eco de la delicada cuestión.
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