Hace casi dos meses que murió en Sevilla a los ochenta y siete años de edad , justamente el día 30 de marzo del año que corre , Consuelo Liñán Rico , tía Consuelo , mujer de mi tío segundo Pepe Álvarez de Toledo y Tovar , uno de los paterfamilias nuestros . Consuelo Liñán fue persona encantadora y , casi no hace falta decirlo , buenísima . Una señora en todos los sentidos , madre de diez hijos . Quedan pocos paterfamilias , cuatro, que son , además de tío Pepe , tan encantador y simpático como su mujer , su hermano Fernando y sus primos hermanos Rafael y Gonzalo Álvarez de Toledo Marvizón. De todos aprendí mediante su ejemplo y su trato. Las generacioones familiares , y las que no lo son , van dando paso , por ley natural , a las posteriores. Yo , miembro de la generación posterior a la de ellos , puedo decir , con cierto sentimiento de orgullo bien entendido , que fueron y son ejemplos de comportamientos admirables. La honradez , la discreción , el saber estar y tratar a las personas , la integridad y la coherencia de sus comportamiemtos con sus ideas los caracterizaron y los caracterizan. No digo más por ser miembro de la familia y pudiera parecer que echo flores sobre mi propio tejado. Sobre nuestros paterfamilias escribí hace algunos años una entrada en el blog . Por tanto no es necesario hablar más sobre sus indudables valores como personas. Solo intentar que las generaciones que los seguimos , la mía entre ellas , los tengamos siempre como ejemplos a seguir. Que los demás miembros de la familia mantengamos su señorío bien entendido y su clase indudable como fueron los de tía Consuelo Liñán.
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