Hoy no sé sobre lo que va a escribir el escribidor , pero acerca de algo escribirá. No lo haré en torno al asunto de mi depresión porque manido está y mis lectores pudieran cansarse o hastiarse de dicha cuestión. Tampoco sobre el señor Donald Trump del que todo el mundo habla y escribe . No lo haré porque no es persona de mi devoción y porque , como otras veces he dicho y prometido , no pienso escribir más sobre política , políticas y políticos sean españoles o extranjeros. Tampoco de fútbol aunque aficionado sea. Las promesas son dignas de respeto , como algunas personas , y ni el señor Trump , ni el fútbol tal como está , ni gran parte de políticos en ejercicio de sus funciones son lo suficientemente dignos para ser respetados o , al menos , a mí así me lo parece porque creo que así es parafraseando , a mi estilo , la farsa filosófica de Luigi Pirandello . Si es así , por algo poco bueno será.
Estoy , por tanto , dudoso en cuanto a la cuestión que abordaré pero sobre alguna escribiré poco o mucho , bien , mal o regular.. Y pensando y pensando me ha venido a la sesera un tema que creo no haber tocado nunca : el aire . Trataré , por consiguiente , un asunto aéreo y etéreo . Es decir , sutil. No hago referencia al aire en su versión ministerial y militar , sino al que respiramos mientras vivimos. Y empezando a escribir algo sobre el aire y los aires , debo decir , de entrada ,que los hay buenos y menos buenos como los de las zonas muy industrializadas o el de la propia ciudad de Madrid , sobremanera cuando se dan ciertas circunstancia meteorológicas y atmosféricas.
En la República Argentina hay una ciudad , la capital como todos sabemos , que tiene el bello nombre de Buenos Aires. Buenos aires debidos , puede ser , a su condición de ciudad costera. Los aires de Cádiz , ciudad también costera , son igualmente buenos y limpios porque los vientos ejercen sus soplos con asiduidad alternándose de forma caprichosa. Me refiero , como es de suponer , a los vientos del Este o del oeste que son los preponderantes: al Levante o al Poniente , con mayúsculas iniciales en sus grafías si soplan con fuerza . Dudo si debo escribir con mayúscula o con minúscula las primeras letras de ambos. El asunto elegido da para bastante más pero mi estado , por ahora , no. Soy tan solo un escribidor que emplazado quedo para dar mi opinión sobre los aires de Cádiz y los no gaditanos que ,hoy , ha cumplido con su obligación de teclear algo por muy incompleto que haya quedado .
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