A opinar sobre el disfraz que llevó la concejal doña María Romay a la final del concurso del Falla. Concejal o concejala , no vaya a molestarse y para que quiero más aunque la Real Academia Española abogue por el uso del término concejal en cuanto alude a ambos géneros , el femenino y el masculino , de Transparencia , Participación Ciudadana y Fiestas del Ayuntamiento de Cádiz . Decir a qué partido pertenece , sobra. Decir que doña María puede ser partidaria del uso del término portavoza , no tanto.
Doña María Romay , según el periódico Diario de Cádiz de la fecha , protesta y denuncia a Faly Pastrana , autor del coro " Las Chimeneas " , por un posible delito de injurias y calumnias hacia su persona. No estoy al tanto de los Carnavales del año que corre ni de lo que Pastrana dijo , pero algo conozco con el auxilio del citado Diario de Cádiz. Poco he visto porque , excepto las chirigotas buenas , sean callejeras u oficiales , mis gustos caminan por otros vericuetos.
Tras ver a la concejal , puedo decir , sin dudarlo , que muestra bonitas formas de mujer con el transparente disfraz émulo de la desnudez con la que Gades aparece en la ciudad de la que es una de sus diosas.
Marginando si el tal disfraz transparente es o no el más adecuado , sí le digo , desde aquí y estando seguro de que es poco probable que estas letras lea , que el Carnaval de Cádiz es muy distinto al de otros lugares. Como gaditana de nacimiento , lo sabe. Muy distinto al de Tenerife o al de Río de Janeiro . En común tienen el significado de la palabra Carnaval , pero en otras manifestaciones en poco se parecen . El de Cádiz es original y perdiéndose en la noche de los tiempos; sui géneris. Intentar imitar a los de otras latitudes es grave error . El de Cádiz tiene su idiosincrasia que no cuadra con mostrar formas íntimas , por muy atractivas que sean , mediante insinuaciones que poco dejan a la imaginación. En el Carnaval gaditano todo se insinúa y nada se muestra ; usted lo sabe . Creo que su disfraz lo hubiese podido lucir , y muy bien , en las ciudades de Tenerife o Río de Janeiro ; no en la ciudad en la que desempeña una concejalía .
Cualquier mujer u hombre tiene plena libertad para disfrazarse como quiera pero si desempeña una concejalía en el Ayuntamiento debiera tenerlo en cuenta al elegirlo. Usted , señorita Romay , solo tuvo en cuenta exhibir sus encantos con los pretextos de imitar a la diosa Gades y de jugar con el primer nombre de su cargo : TRANSPARENCIA. Desconozco qué le habrá dicho su pareja sobre su atuendo en la final . Que su denuncia a Pastrana vaya por buen camino y se haga justicia en caso de que sus declaraciones por escrito sean vistas lo ominosas que usted las considera , es mi deseo . En el Carnaval de Cádiz se tolera todo pero no a todo el mundo . Menos a los ediles .
Sea más consecuente con sus actos y sus disfraces, doña María Romay , y aténgase a las consecuencias que su disfraz pueda tener a la vista de cómo se las gastan ciertas personas.
Si lo que intentaba es que se hablase y se escribiese sobre usted , lo ha conseguido . Ha dado el pelotazo . Al fin y al cabo , propaganda para su partido y lucimiento personal . Es de lo que se trataba. ¿ O no ? .
He leído varias opiniones sobre el disfraz . Como corolario de ellas puedo decir y digo que he notado rechazo hacia los que no son partidarios o defensores de él. Excesivo rechazo a juzgar por lo leído . Tengamos en cuenta el cargo y el nombre de la concejalía que ejerce la señorita Romay.
Si se provoca debieran aceptarse las críticas. Que algunos no lo consideren provocativo , bueno va ; pero que menosprecien a los críticos mal está. Todas las opiniones deben admitirse se compartan o no y vengan de dónde vengan.
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