De las palabras de las que hago mal uso , me invento , o escribo mal. Múltiples son los errores que cometo , lingüísticos o de cualquier tipo , y , por consiguiente , acepto el aviso.
Los académicos son los académicos y con ellos mejor es no llevarles la contraria . Acato y me someto a sus órdenes sean mayores o menores . De ambos órdenes han sido las advertencias que he recibido de la Real Academia Española por unas vías u otras . Me han escrito varios miembros de la institución sobre las faltas que cometo , no es la primera vez que lo hacen , de puntuación , acentuación e incluso de algún error ortográfico. No he preguntado cuáles han sido porque no ha hecho falta hacerlo. Me indicaban cómo se deben escribir los términos según las normas ortográficas vigentes .
Cuando he dicho menores creo que he dicho bien pues hasta ujieres me han escrito . Esto indica que el blog es leído y por miembros más o menos acreditados bajo el punto de vista social y laboral . Bajo ambos prismas .
Una de las palabras que se me han corregido , no pondré nombre al académico en cuestión que ha osado escribirme , no la voy a repetir aquí y ahora por no ser necesario. Solo digo que se me ha corregido y basta .
Sí doy el nombre perteneciente a un ujier de la RAE : don Marcelino Pan y Vino según se lee en el remite de la carta que me escribió. Carta laudatoria y de aquí que dé el nombre del remitente.
En ella , aparte de echarme piropo tras piropo , me aconsejaba que no obedeciera mucho lo que los académicos me escribían . Están anticuados y sobrepasados por la rapidez de los cambios que experimenta la lengua española o castellana , aseguraba Marcelino Pan y Vino . Para él no había duda , ni grande ni pequeña , sobre su aseveración . No obstante , se juega el puesto , me hablaba de alguno de ellos de forma elogiosa y ecuánime .
Marcelino me ha escrito más de una vez mostrándome su fidelidad a prueba de bomba y de espoleta y su coincidencia con mis pareceres y opiniones aquí expuestas .
Como periodista , debo circunscribirme a las normas dadas y propugnadas por la RAE , y dejarme de pamplinas o zarandajas que a ninguna parte conducen.
Como historiador , que también era y soy , debo respetar la verdad de los hechos y no intentar darles la vuelta de una manera u otra . Cuando afirmo , en la cabecera del blog y en entrada próxima de SEVILLACÁDIZ , que unas gotitas de humor no van mal en la cazuela de la verdad ; bien digo.
La verdad , sea histórica , historiográfica , o simplemente pura es siempre compleja. Lo he de decir siempre porque considero que el aserto es verdadero.
Esto es cierto por completo , lo de la verdad . Lo del aviso que he recibido de la Real Academia Española , no. Ojalá lo hubiese sido . Sería indicio de que los académicos me leen .
Por hoy he cumplido con la obligación impuesta . Hago referencia a escribir todos los días sobre algo por nimio que pueda parecer o verdaderamente lo sea.
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