Es la que comunico al periódico en el que colaboro ( La Verdad por Bandera ) para que si a bien lo tiene el consejo de redacción le de vía libre para su publicación en la sección : MINISTRO CON CARTERA Y CON DINERO , así llamada desde ayer , día de la aparición y avistamiento de una gran tortuga en la playa de La Victoria . Yo , una vez que observé el agolpamiento de gente en la orilla , cogí mis potentes , ópticamente hablando , prismáticos y los enfoqué , viéndola a flote y a unos doscientos metros de las arenas playeras. Sería pasada la una de la tarde cuando el escribidor observó con nitidez el blancuzco cuerpo del quelónido desconociendo , desde la distancia de unos doscientos cincuenta metros más o menos , si estaba muerta , viva o tomándose unas cañas. Supe , después y según los expertos observadores , que ni estaba viva ni estaba tomando cañas. Estaba muerta por malas y graves heridas sufridas.
La aparición de otros posibles animales marinos o terrestres , vivos o , por desgracia , muertos , es uno de los motivos que me llevan a permanecer más en la orilla , bajo mi sombrilla , que en aguas más profundas junto a la disminución , por la edad , de mis facultades natatorias. Cuando les pierdo el miedo a animales marinos irracionales y a terrícolas racionales o , tal vez huyendo de estos últimos , es cuando me baño en las mansas aguas de la playa de La Victoria o en algunas otras del litoral gaditano que más agitadas y próximas al Estrecho de Gibraltar están.
Cumplo así mi especie de corresponsalía en Cádiz , concedida por un sevillano a otro con la ayuda , indudable , del corrector británico del periódico y del consejo de redacción del mismo . Aperturismo se llama la figura y no nacionalismos trasnochados como los que parecen estar de moda . La tortuga muerta en aguas del Océano Atlántico podia tener nacionalidad mauritana . portuguesa , argelina o angoleña. Las nacionalidades poco dicen a los muertos y menos debieran decir a los vivos , sobre todo si son desprendidas de naciones mayores.
1 comentario:
Privilegios que tienes por tener ventanales, terraza y acceso a la playa Victoria. Yo solía ir muy temprano y me quedaba hasta que empezaba a estar más concurrida y nadaba huyyyyyyyyyyy mucho...¡Qué tiempos aquellos!
Un abrazo apara los dos.
Publicar un comentario