La medio hermana , hermana de padre de Arturo , Claudia , quien con mi primo José Joaquín Pineda intentó mantener un affaire en la Provenza y Midi galo y , vista la fidelidad de éste para con Mari Casti , su mujer , intentó mantenerlo conmigo pinchando en el mismo hueso a pesar de sus indiscutibles atractivos físicos ha almorzado , hoy , en EL RECLAMO. Es saladísima la francesa..
Aunque hacía un tiempo considerable que no la veía y a pesar de sus pesares amorosos que ya parecen definitivamente resueltos a juzgar por las miraditas recatadas que dirigía a Gastón , su nuevo novio ; no contuvimos más efusividad , al saludarnos , que la recomendada en nuestro santuario del bien yantar y bien catar ante el catalejos que decora la mesa en la que , gentilmente , les sugerí , ejercitando mi digno oficio de relaciones públicas del restaurante. , que podían poner sus posaderas ; perfectas las de Claudia.
El catalejos permite observar la playa tras el ventanón en el que aún no lucen las cortinas decoradas con motivos cinegéticos y venatorios que he diseñado y encargado a una bordadora de mantos de vírgenes sevillanas. La que arregla los desperfectos que las inclemencias del tiempo y el propio tiempo causan en los mantos.
Claudia , con un minipantalón ajustado en lo justo de sus bellas formas , miró a lo lejos y , creyendo que nadie la observaba aunque yo no le quitaba ojos de encima , le largó un gracioso beso a Gastón , quien al sorprenderse por la espontaneidad de su novia , que yo conozco , pensar me hizo que se trataba de novio reciente.
Innecesario es decir que Arturo la atendió fraternalmente recomendándole lo mejorcito de la casa y que salieron satisfechísimos de la calidad y servicio de EL RECLAMO DEL GOURMET.
Yo,. como detalle hacia la pareja y hacia Godofredo , los invité a pasar a la cocina para que conociesen a tamaño artista. La conversación la mantuvieron en francés y pude apreciar el dominio de la lengua de Moliére , de Voltaire y de tantísimos francohablantes más , que evidenciaba Godofrito. Aludió éste a su estancia en París durante un trienio largo y Claudia , tan francesa como coqueta , le hizo un mohín tan gracioso con su nariz respingona que Malagamba dio un respingo. Observé que a Godofrito Malagamba , cuando Claudia salía de la cocina , se le iban los ojos tras el culete de la francesa y , sabiendo que la mirada no se me habia ido por alto , nos guiñamos de forma picarona.. Claudia , la hermana de padre de Arturo Pérez , ha sido la primera francesa que almuerza el EL RECLAMO siendo yo relaciones y orientaciones públicas del buen lugar. Ojalá todas las clientas fuesen como ella. Estarían a juego con las camareras en cuanto a gracia y belleza., características del restaurante.
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