Me llaman al teléfono fijo como hizo ayer don Máximo de la Serena . Primero hablé con ella y después con él . Los dos coincidieron en aceptar que hacía tiempo que no tenían contacto conmigo y los dos coincidieron en sus dichos . En sus hechos se supone que coincidirán.
En lo que respecta a aquellos , y al ser coincidentes y por tanto parecidos , los reúno en uno solo decantándome por los de Tania de Aquitania .
Me adujo que mi amistad con don Máximo era más reciente que la añeja que mantenía con ellos y que habían leído , tanto Gualterio como ella , mi última entrada como leían todas las del blog. Por tanto , mi amistad no debiera desbancarlos en lo que hace a mis preferencias . Que la antigüedad es un grado y debe ser respetada. .
Admití que llevaban más razón que un santo y le dí las gracias por la llamada que , aunque pudiera considerarse como doble por las argumentaciones que me dieron la una y el otro ; es decir Tania y Gualterio , una sola fue.
Me ofrecieron la edición de todas las entradas , como prueba de sus inquebrantable amistad hacia mí, a lo cual me opuse con todas mis fuerzas con argumentos igual de fuertes que mis fuerzas . Es decir , resistentes y vigorosos .
Destaco , entre los muchos que les ofrecí , que no todas las entradas eran dignas de ser publicadas en su diario que tanta tirada y lectores tiene en Andalucía y otras regiones autonómicas de España . Las de los temas culturales pudieran tener cabida en su ALBORADA EN EL SENDERO , pero otras no las consideraba el escribidor con méritos suficientes para que vieran la luz pública .
Ante esta exposición de argumentos , y otros más que no considero adecuados exponer aquí porque para mi intimidad quedan , Tania me dio más gracias y se despidió deseándome mejoría en mi estado. La necesito , dije , antes de colgar el auricular y cortar la conversación que con ellos mantuve ante su respuesta rápida en la que tan amistosos se mostraron y tanto me ofrecieron .
Tania y Gualterio me acaban de demostrar , una vez más , que me quieren y respetan . No serán desbancados por don Máximo aunque amigo mío , como me ha demostrado múltiples veces , sea y lo tenga siempre presente en mis devociones y oraciones . Sobremanera en las transitivas .
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