Como es la de no mandar a Samuelito a colegio alguno . Ni público ni privado porque piensa , lo cuento tal me lo dice , que poco o nada le enseñarán que el niño ya no sepa. . Que tiene ciencia infusa. Piensa que puede haber salido a su abuelo materno porque del paterno sabe poco . Y yo menos , le arguyo , con toda la razón del mundo tanto por su parte como por la mía.
La verdad es que la subida al Almanzor y la traida y llevada de la montaña al lugar en el que se levantó a causa de un movimiento telúrico de gran alcance ocurrido hace milenios y milenios y milenios que nos llevan a perder la cuenta de los miles y millones de años que pudo producirse, ha convertido a la familia dueña de SOCUT en más famosa de lo que hasta ahora era . Ha llegado a ser conocida, pues el prodigio realizado por Samuel lo merece , hasta en el Polo Norte donde a los esquimales no les ha cogido tan de sorpresa pues son testigos de las alteraciones de la banquise , y hasta la Patagonia y el Estrecho de Magallanes , cerca del Polo Sur. En algún sentido los poderes prodigiosos del infante me recuerdan a la conocida frase que habla de Mahoma y la montaña. Si prodigio lo fue Mahoma , tanto lo es Samuelito ; si bien en el caso del hijo de Oran estos empezaron a producirse con menos edad : con días .
Le he preguntado a Oran , sirviéndome de mi oficio de amanuense suyo , sobre la opinión que su hijo, y de Marisa , tiene sobre el tan traído y llevado cambio climático del que tanto se habla . Se habla tanto como de Puigdemont y de Catalúña o más si cabe.
Oran me ha respondido diciéndome que mucho ha hablado con el niño en torno a ambas cuestiones de actualidad , ya que de Oráculo de Hervás le hace , y Samuelito , sobre las dos cuestiones que su padre le planteaba ha respondido , como si respondiese el Oráculo de Delfos , con un no me cabe duda pero algunas tengo y que dos problemas de capital importancia pueden ser. No son , ha matizado a continuación , pero pueden llegar a serlos
Yo , Wilhelmus el escribidor , que ni a la suela del patuco le llega a Samuelito , sí soy más rotundo . Para algo no vivo ni habita mi piel bajo el monte Parnaso ni mucha poesía tienen mis letras . Yo , sin que nadie me haya dado vela en la cuestión , pero tomándola como propia en cuanto que ambos asuntos me afectan o me pueden afectar ; creo que sí son temas , muy de actualidad , de difícil solución.
La fama de Samuelito ha llegado hasta los más recónditos lugares del planeta azul y del planeta rojo. Rosita Rojo , desde Marte , me ha escrito una misiva en la que me hace mención al prodigio que el niño llevó a cabo con el monte o pico Almanzor , desplazándolo del lugar en el que emergió a consecuencia del plegamiento Alpino Himalayo hasta las proximidades de Hervás , y volviéndolo a colocar , o a recolocar , en el lugar en el que se elevó . Rosita Rojo ha aprovechado la misiva para comunicarme que tiene otro novio con el que , si yo la invito a la inauguración del nuevo RECLAMO DEL GOURMET , vendrá , muy gustosa , y cree que él también , a la Tierra desde Marte. El nombre del nuevo amor de Rosita es el de Centello Irisado y De Todos los Colores (segundo apellido) . Al señor Musk no pienso decirle nada porque su escepticismo me lleva a dudar de todo ; incluso de los prodigios de Samuelito . No de la sapiencia de Oran , ni de su mujer Marisa. Ni , por supuesto , del viaje que desde la Tierra , despegando desde la base de Arenosillo , provincia de Huelva , realizamos Arturo Pérez y Pérez , Arturito en confianza , pilotando la nave aeroespacial española , José Joaquín Pineda Calle , primo hermano mío y yo , Wilhelmus Alvarinus Toletanus Pinaster , quien firma con un solo apellido como los cánones mandan ( exactamente Guillermo A. De Toledo ) ; viaje ignorado desde las más altas instancias hasta las más bajas pasando por las medianas de los Estados Unidos , de Rusia y de todos los Estados interesado en vuelos interplanetarios como Corea del Norte y otros.
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