Buscar este blog

Vistas de página en total

EL BLOG DE GUILLERMO ÁLVAREZ DE TOLEDO PINEDA. Blog independiente y de temas multicolores. Entre ellos , el tema estrella : Historia de los Álvarez de Toledo Golfín. Etiquetas temáticas en la parte inferior y lateral con las gracias por entrar y leerme.Unas gotitas de humor no van mal en la cazuela de la VERDAD y mucho pueden decir.

miércoles, 4 de marzo de 2009

MEDALLAS Y TOREROS


La primera vez que fui a ver una corrida de toros lo hice de la mano de mi abuelo Pepe Pineda hace ya muchos años. Atravesamos, andando, un centro de Sevilla atiborrado de gente que callejeaba , sobre todo, desde Sierpes a Plaza Nueva y desde aquí al Baratillo. De vez en cuando, mi abuelo se paraba para saludar a alguien o ser saludado por alguien y me presentaba como su nieto “ piruli”. Las paradas fueron haciéndose más frecuentes a medida que nos acercábamos a la Maestranza.Las arcadas, el albero y el azul del cielo que cubría el coso deslumbraron, para toda la vida, al niño que yo, por entonces, era. Aunque en casa solía oir hablar de toros y de toreros, aquel día quedó grabado en mi memoria a hierro y fuego. No recuerdo la terna, pero sí a uno de sus componentes: Curro Romero, artista admirado por mi abuelo, cuya admiración supo traspasarme, al igual que la afición a todo el mundo, tan genuinamente ibérico, de los toros. Tanta afición que estuve tentado, años más tarde, a correrlos en Pamplona. Me faltó valor.
Aun partiendo de que todo torero, por el hecho de serlo, es merecedor de máximo respeto, siempre los toreros artistas me han tirado más. Cuestión de gustos. Los que crean belleza mediante la conjunción y armonía entre su cuerpo y el morlaco. Los del “ pellizco” consabido. No se encuentra entre éstos Francisco Rivera, torero digno y de abolengo taurino, pero a quien la medalla de oro a las bellas artes, recientemente concedida, va contraestilo. Sin ir más lejos, y para quedar en familia, más le hubiese cuadrado a su hermano Cayetano aunque su ejecutoria taurina sea bastante más corta. Tampoco, en el mismo sentido, olvido a su abuelo Antonio Ordoñez.A cada cual lo suyo.