Recibo llamada de Tania. Me dice que le gustaría que escribiese un artículo de opinión , en LA ALBORADA MISTERIOSA , sobre le renuncia de EL PAPA Benedictus XVI a. su PAPADO. Con el respeto que mi guapa directora me merece , me niego en redondo a escribir sobre tema tan delicado e íntimo. Creo que , así , respeto a la máxima autoridad de la religión católica. Insiste Tania en su pretensión y yo en mi negativa hasta el punto de que creo que en algún momento ella se pasó de su rosca y yo de la mía. No obstante , como nuestra admiración y respeto son mútuos , el agua no llegó al río . Quedamos , en ello hubo acuerdo absoluto , en que , al menos , escribiera algo más sobre literatura y libros que he leído a lo largo de mi sesentona vida. Por aquí sí , le dije , mientras le daba recuerdos afectuosos para su familia al tiempo que le comentaba que he leído EL QUIJOTE , entero , de pe a pa , cinco veces y disfrutando de los saberes y gran literatura que don Miguel supo exponer en su obra maestra. Capítulos aislados , como es natural , muchísimas más.
Una cosa es escribir sobre literatura y otra ponerme a opinar sobre decisiones ajenas ; algo que se suele hacer sin conocimiento de causa y las que hayan llevado a don José Aloisio Ratzinger a tomar su decisión solo él las sabe y nadie es quién para meterse en sus más íntimos deseos. Tengamos en cuenta que EL PAPA es EL PAPA y no algún politiquillo español o de donde sea . Yo me imagino las probables causas pero éstas quedan , también y con el mismo derecho , en mi intimidad. Cada uno tenemos nuestra alma en nuestro armario y nadie debiese abrirlo. Tania , tan inteligente , ha terminado por aceptar mi negativa y no ha insistido más. Menor resistencia hubiese encontrado si su llamada me hubiese propuesto otras cosas en caso de no ser violentas y sí placenteras. Creo que se me entiende todo. Qué atractiva es Tania de Aquitania con sus verdes ojos y sus altos pómulos .Qué gran directora tengo a mis años y qué transigente es. Cuánto vale intelectual y físicamente. No es adulación de asalariado , porque adular ha sido verbo que jamás he practicado , sino mera constatación de realidades. La verdad es la verdad y siempre se debe decir y defender aunque , a veces , nos cree problemas.
Wilhelmus Albarinus Toletanus dixit.
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