Lo hizo sin previo aviso. Al fin y al cabo , viajando por el espacio en su sofisticado vehículo interplanetario y no en el que mis queriddos acompañantes ( primo y amigo ) y yo fuimos al planeta rojo tardando lo que está en los escritos que aparecen en este blog sobre la etiqueta: EL VIAJE A MARTE , no tarda ni tres horas en atravesar el espacio cósmico que separa Marte del planeta Tierra . Sabido es que yo , yendo desde Cádiz a Sevilla por la autopista , si no hay interrupciones en el puende de la bahía o zonas próximas por motivos laborales justificadísimos , recorrro los ciento treinta kilómetros que separan una ciudad de otra , en hora y media. Pero claro : Marte es Marte y el planeta Tierra el planeta Tierra como también es sabido.
Estando yo en la terraza del Rebel-Bar del paseo marítimo gaditano mirando el mar y soñando que estaba junto a ti , Carmen-carminis , aunque tú estuvieses dentro del lugar y muy cerca del escenario esperando la actuación de nuestro hijo, Guillermo Alvah en el mundo de los cantautores-trovadores , y de don Rafa Toro , malagueño de pro . Mirando , fumándome una pipa y disfrutando de la noche serena y estrellada , vi , en la semiobscuridad ( se sabe que prefiero escribir obscuridad a oscuridad aunque la grafía esté un poco anticuada ) vi , en lontananza , un objeto brillante y volante que , a velocidad del rayo , se aproximaba a las arenas de la playa de la Victoria , tan urbana como gaditana y a mi casa cercana. Llegó en un santiamén el vehículo interplanetario. Desde que lo atisbé hasta que vi la recortada y cortita figura de Rosita en las arenas no pasaron ni tres minutos en los que estuve pensando que , al instante , vería a Rosita que volvía a Cádiz para ver y oír cantar , en especial , a Guillermo Alvah , su admiradísimo trovador andaluz del tercer milenio. Con ella disfrutamos de su compañía , de nuevo , y de las letras y músicas de Wilhelmus y de Toro . Era la cuarta o quinta vez que Wilhelmus actuaba en el Rebel-Bar , pero no por éso nos gustó menos , sino todo lo contario : gusta más cada vez que se le ve actuar , tal como Rosita Rojo nos dijo y yo no debiera decir por ser el padre del músico-poeta al poderse considerar mi opinión poco objetiva . Voy a editar esta entrada sobre la etiqueta de MIS HIJOS porque Wilhelmus , que yo sepa , es hijo mío. Buen hijo aunque , a veces , pienso que no conoce bien a su padre. Ojalá , a veces , erre en mis pensamientos. Erre y no erre que erre como don Mariano Rajoy hace.
Rosita , una vez terminado lo que llaman concierto , se volvió a Marte satisfecha. Tan satisfecha como Carmen.carminis y yo nos volvimos a casa de la que estábamos a un minuto.Ah , Rosita Rojo me dijo que mis colaboraciones en A.B.C. INTERESTELAR están teniendo una aceptación y divulgación cósmica. No esperábamos otra cosa ... aunque mucho malo esperemos de LA COSA.
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