Con lo felices que estábamos en los Andes. Con lo que nos relamíamos de bienestar . Acabamos de recibir un comunicado del ministerio de asuntos exteriores de nuestra apaleada España en el que se nos impele a cortar el viaje y regresar , de prisa , corriendo y volando a nuestro aeropuerto de salida , como las antiguas flotas castellanas que zarpaban de Sevilla y a Sevilla tenían que volver tras la travesía del Atlántico rumbo a las que fueron nuestras Indias. De seguir la COSA así , podremos decir que cualquier tiempo pasado fue mejor. Peores que los que se nos avecinan habrá habido , pero éstos son malos , perversos ; porque no son nuestros dirigentes políticos quienes nos gobiernan sino unos seres extraños a nosotros a los que llaman mercados y que son capaces de cualquier mal con tal de ganar más y más , caiga quien caiga y más de la cuenta caen y están por caer. Hemos recibido la noticia y nos hemos quedado cariacontecidos y tristones cuales jóvenes que terminan sus estudios y no encuentran trabajo alguno ni esperanzas de hallarlo albergan en sus horizontes vitales.
Nuestros rostros , bronceados por el sol andino , reflejan inmensa tristeza y decaimiento. La música de Guillermo Alvah ha cesado.La sonrisa de mi primo José Joaquín también. El mecánico John Bristol ha perdido su contagiosa simpatía , Arturo su licorera y botellas de escocés sin las cuales casi no puede vivir y don Eufrasio de la Frase y Suárez de Golfín , quien pensaba hacer una investigación sobre los Golfines que se naturalizaron en tierras del antiguo virreinato de Nueva Castilla , descendientes de un hidalgo cacereño que all recibió una luenga y ancha encomienda en agradecimiento real a los servivcios de armas y jurídicos prestados, llora y llora por los rincones como lloraba la Salvaora. Sabemos la causa de sus lágrimas que los demás contenemos a base de hacer pucheritos que tanto nos afean. Hay motivos para llorar. No es el caso de las lágrimas de mujer que derraman las mujeres y los hombres de Sevilla porque sus cofradías no pueden salir a la calle por lluvias semanasanteras. Hay un sinnúmero de cosas peores que la supresiíon de una salida procesional en Sevilla , donde la lluvia es una maravilla , que sí merecen lágrimas sentidas y de pena. Entre ellas , la situación a la que nos están llevando esos llamados mercados y que no son más que merdaceres avariciosos de ganancias.
Esperamos y deseamos que la interrupción del viaje , forzada por causas macroeconómicas , y el subsiguiente viaje de retorno no nos depare problemas mayores que los que padecemos. Si todo se desarrolla con normalidad , aterrizaremos dentro de unos días ( hay que ordenar antes algunas cosas y pagar algunas cuentas de hotel ) en el aeropuerto de san Pablo. Preferiríamos llegar bien de salud porque de no ser así no sabemos lo que nos tendríamos que gastar en médicos y medicinas de nuestro bolsillo. Los ahorritos , tal como van a dejar la seguridad social , tenderán a ir desapareciendo paulatinamente. La sociedad del bienestar que el hipercapitalismo nos prestó durante un tiempo para meternos en su bola , está a punto de desaparecer como desapareció el régimen parasocialista de los Incas con los que tanta relación hemos tenido durante estos inolvidables días. ESPAÑA Y ESPAÑOLES: VAN CONTRA NOSOTROS y nosotros diciendo tonterías por el estilo de la que a continuación escribo : ES QUE LOS ANDALUCES SON UNOS FLOJOS Y UNOS SERES INDESEABLES POR NO HABER VOTADO MUY MAYORITARIAMENTE AL SEÑOR ARENAS. Por algo habrá sido ; pero él , aunque hubiese alcanzado la presidencia del gobierno andaluz , no hubiese mandado. En las casas españolas mandan las mujeres. En España , no los españoles. Mandan otros . Éstos sí que son extranjeros indeseables a los que algunos indígenas les hacen el juego. Sucio , por supuesto. Como la COSA siga así pierdo mi empleo y mi sueldo por muy buena persona que sea mi lejano pariente don Eufrasio , quien anonadado está.
No hay comentarios:
Publicar un comentario