Desconocedores de cosas que su importancia tienen y pamplinosos hay en todas las familias , incluídas las mejores de las que formamos y formo parte, la de los Ávarez de Toledo Golfín que no es más que una rama, o línea segundona , de los Toledo o Álvarez de Toledo de las casa de Oropesa cuyos orígenes son comunes a las casas de Alba , Villafranca y derivadas de ellas. También , en todos los linajes y familias hay , menos mal , abundancia de personas en condiciones : buenas , cultas , inteligentes , sensibles y con delicadeza . A los escasos miembros de nuestra familia extensa , de nuestro linaje de Toledo , que , en un momento dado mantuvieron dudas sobre nuestra procedencia , dirijo estas letras sin acritud pero con más razón que un santo. Los argumentos y la rigurosidad son tan aplastantes como evidentes si se tienen ojos en la cara y mente lúcida y sana . A ellos que , sin motivos justificados salvo los que quisiesen inventarse , dudaron de nuestra ejecutoria y trayectoría histórica honrada y ejemplar a carta cabal y de nobleza . A ellos que nos hicieron preguntas innecesarias con motivo de la primera gran reunión de los Álvarez de Toledo celebrada en Ávila a la que asistimos , argumentando que la comisión prefería conocernos por nuestras respuestas antes de investigar por su propia cuenta. Podrían haberlo hecho así y , de igual forma , sus dudas se hubiesen aclarado. Investigación y preguntas que delataban ignorancia manifiesta y que molesta resultó a los Álvarez de Toledo Golfín algunos de cuyos miembros , los mayores , ya no están en el siglo que corre.
Nosotros no preguntamos nada a ellos , quienes nos invitaron y llamaron unas veces con exquisitas formas y otras sin ellas , aunque en algunos aspectos nuestras dudas albergamos en algunos puntos de la historia familiar . Poníamos . así , nuestro saber estar , patente y nuestro agradecimiento por invitarnos a la primera gran reunión de todos los Álvarez de Toledo a través de Genoveva Madurga Álvarez de Toledo , persona encantadora. Tras la primera gran reunión vendría la segunda a la que asistió un buen número de Álvarez de Toledo Golfín, no pudiendo yo asistir a la reunión de la Gran Peña de Madrid por mi depresión.
La Historia , los documentos existentes sobre nosotros , la historiografía , los genealogistas , los archivos , muestran nuestra trayectoria y ejecutoria de nobleza con facilidad . Están al alcance de la mano de quien desee conocer nuestro devenir y nuestra realidad actual.
Si el asunto de la duda marchaba por el hipotético desconocimiento , hasta ahora , de la filiación materna de mi décimo sexto abuelo por Toledo, Fernán Álvarez de Toledo , Corregidor y Juez Mayor del Rey Enrique IV en Cáceres en el último cuarto del siglo XIV , casado con doña Isabel Álvarez de Saavedra , señora de la Corchuela , la cuestión sobrepasa lo irrisorio y casi alcanza lo ridículo . Si el asunto iba en dirección a que nunca hemos alcanzado la Grandeza de España , de igual forma se sobrepasa lo uno y casi se alcanza lo otro. Tan Toledo somos los Álvarez de Toledo Golfín como los que tienen Grandeza de España . Los mismos orígenes tenemos y nuestras trayectorias históricas son nobles se miren por donde se miren y se hayan desarrollado en el norte , en el centro o , como es nuestro caso , preferentemente en el sur de España.
Si el intento discriminatorio o duda que tuvieron esos pocos parientes lejanos ( de cuya lejanía yo , de forma personal , me alegro ) se debió a que parte de nosotros perdió el patrimonio familiar por cuestiones inherentes al devenir , pero no por extrañas formas de actuación y comportamiento reñidas con la honradez y la caballerosidad , entonces el motivo de sus dudas ( que superadas parecen ) sobrepasaría los límites de la coherencia y de la nobleza de cualquier tipo hasta el punto de perder el sentido de la justicia y el señorío ; cualidades , estas dos que acabo de citar , que seguimos conservando , a rajatabla , buen número de los Álvarez de Toledo Golfín
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