Así es por increíble que pueda parecer. Que a un vejete incipiente pero no inconsciente le lleguen a su correo ofertas laborales ofreciéndole empleos de índole variada no está a la orden del día , sino todo lo contrario. Adelanto que no he aceptado las ofertas laborales al considerarlas poco indicadas para mis habilidades y , algunas , de dudosa legalidad y honestidad. Sobre éstas no voy a especificar , pero sobre otras sí. Lo siguiente :
Se trata de ofertas para individuos de características muy dispares a las mías y para las que no me considero suficientemente preparado ( no soy de los tantos que se creen preparados para cualquier tipo de trabajos ni estoy dispuesto a aceptar propuestas deshonestas de nadie por muy ventajosos , pecuniariamente , que fuesen algunas ) . La mayoría de las que he contemplado como probables de aceptar pero después he rechazado la probabilidad , me hablaban de unos horarios inadmisibles por su número de horas y , de igual forma , inadmisibles por los sueldos. Me ofrecían unos contratos leoninos y efímeros , algunos por dos días de duración , que , aunque fuesen en casa , no me compensaban . Unas formas de abuso laboral en condiciones de semiesclavitud casera que tal vez fuesen las deseadas por quien carece de empleo pero no por un jubilado cuya pensión le permite ir tirando y ha ejercido como periodista de élite en varios rotativos a más de haber buscado a Bin o Ben Laden por los centros de la Tierra y de los mares logrando entrevistarlo antes , mucho antes , de que los norteamericanos le dieran los tiros que fuesen por su abyecta acción y dirección del atentado de las torres gemelas de Nueva York. No cito otros méritos y viajes en arriesgadas misiones porque mis lectores los conocen , más si cito y repito que las condiciones que se me ofrecían eran inadmisibles para mí y para cualquier persona de una mediana preparación y de un mediano pasar. Probablemnete este tipo de ofertas laborales sea el del que los políticos en el candelero presumen para afirmar que la situación de LA COSA mejora en España ; más ésta afirmación creo que no se la creen ni ellos mismos , ni que los bien intencionados ( así parecen ) de PODEMOS tengan poder y capacidades para solucionarla o , como mínimo , mejorarla. A pesar de lo anteriormente escrito , he leído todas las ofertas y solo una de las múltiples ( cien o más ) me ha parecido que , cuando la pese y sopese mejor , tal vez acepte : la de decorador de la empresa MESAS REDONDAS que tantos recuerdos me traen de las camillas en las que de niño jugaba y tantas connotaciones tiene con los caballeros de ella y con Arturo , Rey de Britania. Nunca está de más tratar y hablar con caballeros de verdad y no con caballeros que de caballeros nada o poco tienen y tantísimos hay o se las dan de ello. Acepte o rechace la oferta laboral de la empresa : MESAS REDONDAS , intentaré , como escribidor que soy , retomar la novela , que apartada tengo de mi mano y de mi cabeza , sobre José Álvarez de Toledo y Dubois . Una cosa y un tiempo no debe quitar nada a la otra ni al otro. No debiera como nadie debiera quitarle nada a nadie aunque esto raras veces se cumple ; sobre todo en nuestra España.
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