LA ABDUCCIÓN PASA FACTURA

  Y tanta. Ignoro hasta cuándo perdurarán los síntomas que encamado me tienen y a sopita y buenos vinos. No muchos a pesar de las insistentes llamadas de Arturo asegurándome que in vino est salus et veritas. Dice que no ha conocido a algún borracho malo ni beato bueno. Creo que lo primero lo dice por él y lo segundo es de fácil constatación ( otro palito que doy a los religiosos en exceso porque todos los excesos son nocivos para la salud de alma y cuerpo ). Es lo que pienso y creo a más de que hay algo espiritual en algunos hombres. No en todos.En algunos espiritualidad y sensibilidad y en muchos beatería hueca , sin más ni menos ; la que hay. Repito que es lo que pienso con cierto conocimiento de causa y sin querer dar nombres porque no soy nadie para denunciar ni creo que sería de caballero. Caballero encamado y doliente como nuestro rey Enrique III , hijo de Juan I de Castilla y de doña Leonor de Aragón , que yace , ya sin dolores ni molestias , en la capilla de los reyes nuevos de la catedral de Toledo desde el lejano año de 1406. Yo sí yazco , aunque vivo , en mi tálamo , cuidado y bien atendido por mi mujer. Me duele la cabeza , me duelen los huesos y músculos de mi cuerpo añoso tras la presión a la que me sometió , al abducirme , mi amiga Rosita Rojo quien se ha negado a volver más a nuestro  planeta azul. Afirma , con convicción absoluta , que , si queremos volver a vernos , vayamos los tres , José Joaquín , Arturo y yo  , de nuevo a su planeta rojo sangre o rojo tomate. Que los terrícolas tenemos tomate a pesar de no ser nuestro color de naturaleza salvo cuando tomamos demasiado sol de una vez y nuestras pieles son blancas o hace tiempo que no se exponen a los benefactores rayos de Helios. Me duelen los ojos y el cielo de la boca , los dientes , las orejas y hasta el peroné me duele cual si luenga caminata hubiese dado por las montañas de Villaluenga del Rosario , el pueblo tan pintoresco de la sierra de Cádiz al que íbamos con los niños cuando eran chicos y que tanto nos gustaba ir. Guardamos entrañables recuerdos del pueblo y de gran parte de sus escasos quinientos habitantes.

No quiero , jamás , volver a ser abducido , no solo por las molestias y dolores que llevo sufriendo hace una semana , sino porque éstas limitan sobremanera mis y nuestros deseos de continuar viajando por distantes tierras de nuestro mal encaminado planeta azul.  ¡Qué buenos terrícolas seríamos si hobiessemos mejores señores terrestres.!. No los mal llamados señores del club Bilderberg y sus compinches que tan mal me trataron y tratan al género humano. Chupaos ésta , caridurísimos y nada carísimos , que es lo que mereceis. Aunque siempre dispuesto a perdonar , la que me estais haciendo pasar y los perjuicios de todo tipo a los que me someteis y nos someteis , no se me olvidarán nunca. Perdono pero no olvido , lo que no dice nada. Nada más que lo que digo.