MINUCIAS SOMOS AUNQUE ALGUNOS SE CREAN LO CONTRARIO

 Abunda la gente que cree ser algo importante en la sociedad y en el mundo. Muchos son los que piensan que por ser capitanes de navío , profesores de universidad , presidentes de audiencias , políticos de mayor o menor responsabilidad , duques , marqueses y  condes , futbolistas , presentadores de televisión  , comentaristas políticos ,o poder llevar un tren de vida desahogado ... son gente importante y presumen de ello. Aquí está , en la presunción de lo que se es o de lo que se posee, la gran equivocación . Un error garrafal que los sociólogos y los aficionados a la sociología podemos constatar y comprobar con asiduidad. Con una frecuencia que irrita pero que es real como la misma vida. Forman parte de este grupo más de la cuenta . En su ignorancia , ignoran que la categoría y la dignidad se la dan al hombre la sencillez en el trato , el respeto al prójimo por muy distinto que  éste sea y otros varios valores que poco tienen que ver con el puesto que cada uno ocupa dentro de la injusta sociedad. Demuestran estos seres carencia de distinción y de elegancia natural , de tantas cosas... Demuestran ser unos seres ridículos al considerarse más que otros y presumir de ello. No todos somos iguales en todo , diría que en poco y gracias a Dios , pero las distintas condiciones del hombre y su mayor o menor inteligencia y valores nos hace , si tenemos visión amplia del mundo pasado y presente  , saber , con certeza , que somos minucias dentro del infinito universo. Qué mentes más pobretonas tienen estas minucias que se creen esto o lo otro y , al creerlo , son aún mayores minucias que el resto al que discriminan y marginan. Qué se habrán creído los creídos de esto o de lo otro. Me causan risa y lástima los muy equivocados. Carecen de amplitud de miras y de tantas cosas...El cerrilismo y lo montuno serían buenos adjetivos para calificarlos. Así los califico,montunos y cerriles , utilizando términos suaves. Todos , en la noche de los tiempos y en los días que vivimos somos minucias dentro del Cosmos. Nuestras vidas , soplos que el viento de la muerte los arrastra . Ríos que van a dar a la mar que es el morir como ecribió Jorge Manrique en su Coplas por la muerte de su padre a mediados del siglo XV que tan lejano parece a las mentes cortas y tan próximo a las largas y lúcidas. A las minucias que se creen no serlo , el siglo XV les parecerá lejano. Allá ellos y sus planteamientos memos.
La ley de la relatividad existe.